El gazpacho es una comida ideal para todas las épocas del año, pero especialmente para el mes de enero, momento en el que lo único que queremos es empezar a cumplir los propósitos de año nuevo, entre los que seguramente se encuentre el objetivo de recuperar el orden y el equilibrio con la alimentación. El gazpacho es más que una sopa fría, pues si se desea, se le puede añadir guarnición y convertirlo en un primer plato completo e, incluso, de los más saludables.

Es una comida baja en calorías hecha a base de vegetales crudos, por lo que contiene una infinidad de antioxidantes idóneos para la dieta detox tan perseguida en esta época, especialmente el licopeno, un compuesto de gran cantidad antioxidante que se encuentra en el tomate. También por este compuesto, este tipo de primer plato hidrata la piel, a lo que también ayuda  la vitamina C del pimiento y del tomate.

Algo a tener en cuenta también en esta fría época es que el gazpacho es un alimento que contribuye a prevenir los resfriados por su alto contenido en minerales.  En concreto, es rico en vitaminas, A, C, E, y minerales, siendo los típicos el hierro, el fósforo, o el calcio.

A nivel de patologías puede ayudar a nivelar el colesterol y la hipertensión,, sobre todo a aquellas personas que hayan llevado una dieta desequilibrada.

Todos los especialistas aconsejan tomar unos dos litros de agua al día y el gazpacho puede contribuir a esa hidratación. No a todo el mundo le gusta beber agua sin tener sed. El hecho de que haya alimentos sin gas, sin alcohol como el gazpacho, contribuye a que se consiga el nivel de hidratación recomendado disfrutando de la bebida.

El salmorejo, variante del gazpacho, también es una receta propia para las dietas detox, ya que es un alimento fresco y equilibrado, que aporta nutrientes. El salmorejo es fino, digestivo y agradable para todo los paladares que busquen una comida tan exquisita como sana.

Pero, ¿Cómo se conservan mejor el gazpacho y el salmorejo? En MAJAO tenemos claro que siempre frescos, concretamente entre dos y cuatro grados. Conservando la necesaria cadena de frío, la duración de nuestros productos puede sobrepasar los 45 días en perfecto estado.

¡Cuídate con MAJAO, porque MAJAO… bueno todo el año!